«Según Don Juan, la culminación de la búsqueda de un chamán es algo que el considera el 'hecho energético' más esencial,
no sólo para los videntes, sino para cada ser humano sobre la Tierra.
Lo llama el 'viaje definitivo'. [...] El 'viaje definitivo' es la
posibilidad de que la conciencia individual, acrecentada hasta el límite
por la adherencia del individuo a la 'cognición de los chamanes',
puediera mantenerse más allá del punto en que el organismo es capaz de
funcionar como una unidad cohesiva, es decir, más allá de la muerte.
Esta conciencia trascendental fue comprendida por los chamanes del
México antiguo como la posibilidad de que la conciencia de los seres
humanos fuera más allá de lo conocido para llegar, de esta forma, al
nivel de la energía que fluye en el universo. Los chamanes como don Juan
Matus definieron su búsqueda como la búsqueda de llegar a ser, al
final, un 'ser inorgánico', es decir, energía consciente de sí misma,
actuando como una unidad cohesiva, pero sin un organismo. Llamaron a
este aspecto de su cognición, 'libertad total', en estado en el que
existe la conciencia, libre de las imposiciones de la socialización y de
la sintaxis.»
Carlos Castaneda, 1998
No hay comentarios:
Publicar un comentario